La primera utilización del PRP se remonta a finales de la década de 1980.
El primer informe publicado sobre su aplicación fue en 1987, en el contexto de una cirugía a corazón abierto en Italia.
Después de esta operación, la terapia de PRP comenzó a ganar popularidad en la década de 1990.
Se aplica hoy en día para diversas necesidades en diferentes campos, tanto en el sector médico, como la medicina deportiva, la odontología y la estética.
Destacadamente, se utiliza en ortopedia, dermatología, para la pérdida de cabello y varios otros campos estéticos.